Chris Pratt, sin ningún tipo de dudas, es la estrella más brillante del cine actual. De hecho, vamos un poco más allá: Chris Pratt es la estrella que Hollywood necesitaba. Pratt tiene carisma, es guapo, es gracioso, sabe actuar y sabe elegir bien sus papeles, además de ser bastante celoso con su vida privada. Le conocimos hace ya unos cuantos años en la serie 'Parks&Recreation' interpretando al bueno de Andy, que nos ha dado uno de los gifs más usados de todo internet.
Le vimos en 'Everwood' también, pero donde dio el salto a la fama y al gran público fue gracias a Marvel y su Star Lord de 'Guardianes de la Galaxia' allá por 2014. La apuesta de Marvel por un nuevo grupo de desconocidos le salió bien y el carisma de Pratt hizo el resto. Además, en 2014 dio voz a Emmet en 'La Lego Película', película que también funcionó muy bien entre el público. Pero aún quedaba por llegar el plato fuerte: 'Jurassic World'. El regreso de los dinosaurios reventó la taquilla de medio mundo y Pratt se convirtió en ídolo de masas.
Casado con Anna Faris durante 8 años (en 2017 se divorciaron), se volvió a casar en 2019 con Katherine Schwarzenegger. Pese a todo, el actor cuida mucho su vida privada y no se le conoce ningún tipo de escándalo. Ha sabido esconder del gran público su personalidad ultra-conservadora (la Iglesia a la que acude promueve las terapias de conversión, es defensor de la Segunda Enmienda y ama ir de caza), y eso le ha granjeado una imagen de bonachón, jovial y amigable.