Las polémicas más bestias de Sacha Baron Cohen

Durante la emisión de 'Da Ali G Show', uno de los momentos álgidos eran las entrevistas que Baron Cohen realizaba a diferentes celebridades, siempre dentro del papel y sin que sus entrevistados supiesen que se enfrentaban a un personaje. Durante su encuentro con Neil Hamilton, político miembro del Parlamento británico, el actor le ofreció fumar uno de sus cigarrillos especiales. Hamilton aceptó y, en consecuencia, tenemos unas bonitas imágenes de un político fumando marihuana.

Otro de los encuentros más comentados de la sección, fue su cruce con Pat Buchanan, político y comentarista norteamericano que llegó a ser consejero de Nixon, Ford y Reagan y que, en aquel momento, defendía la existencia de armas de destrucción masiva en Irak con todas sus fuerzas. Baron Cohen se las ingenió para sustituir el termino en inglés con el que se conocía a las escurridizas armas, WMD, por otro algo menos peligroso, BLT, siglas de una conocida combinación de bacon, lechuga y tomate. Gracias a esto, Buchanan defiende durante varios minutos la invasión de Irak por culpa de unos sandwiches con buena pinta.

Cuando Borat fue invitado a presentar la actuación de Gnarls Barkley en los MTV Movie Awards de 2006, todos esperaban alguna salida de tono en cualquier momento. La "agraciada" fue la pobre Jessica Simpson de quien el kazajo comentó: "me encanta su boca, la puedo ver perfectamente a través de sus pantalones vaqueros".

Su llegada triunfal al estreno de 'Borat' en Reino Unido, la realizó en un carro, junto a una mula, tirado por mujeres recién llegadas desde Kazajistán. Su discurso fue claro: "Buenas noches, caballeros y prostitutas. Después de esto, estaré en un hotel en Kings Cross. Estaremos bebiendo, luchando sin ropa y lanzando perros por la ventana".

Como parte del rodaje de 'Brüno', Baron Cohen y su equipo consiguieron acceder al desfile de Ágatha Ruiz de la Prada en Milán en 2008. Sin que la organización supiese nada del asunto, el actor se coló en la pasarela llevando un traje de velcro donde se había pegado todas las telas a su alcance. Los de seguridad terminaron apagando las luces para sacar al espontáneo de la manera menos vistosa posible. La escena entera está en la película.

En otro momento de 'Brüno', el protagonista visita un programa norteamericano en el se presenta como padre soltero de un niño "afroamericano que cambió en África por un iPod". La audiencia, formada únicamente por auténtico público afroamericano, se va calentando con cada barrabasada del cómico. La escena termina con la entrada de una falsa encargada de los derechos del menor que se hace cargo del niño mientras el público aplaude y Brüno llora, peleando con los responsables de seguridad del programa.

Pero la cinta, que aunque menos redonda que 'Borat' sí fue más salvaje, se guarda lo mejor para el final. Baron Cohen intenta que su personaje se haga un hombre y lo encierra en una jaula durante un espectáculo de wrestling al que acuden cientos de sureños borrachos de ideas arias. Durante el combate, algo sucede entre el ahora conocido como Straight Dave y su oponente. Brüno escapa de su corazón y besa tórridamente al que fuese su adversario. Según la escena sube de tono, el público sale del recinto mientras adorna el escenario con todo tipo de objetos, incluidas algunas sillas voladoras que obligan a los productores a sacar a Baron Cohen del lugar de manera inmediata.

El problemático modelo alemán también se dejó caer en los premios MTV, y digo caer literalmente. El actor apareció colgado de unos cables, disfrazado de Brüno vestido de ángel y aterrizando de manera algo inapropiada sobre Eminem. El rapero no se tomó el asunto muy bien y terminó abandonando la sala.

Aunque se ha alejado de los peligros de mockumentary extremo, eso no quiere decir que Baron Cohen haya decidido dejar de abusar de las tragaderas de su público. Eso ocurre en 'Agente contrainteligente', que tuvo una extraña presentación en 'Jimmy Kimmel Live!'. Ante la imposibilidad de mostrar las imágenes que la productora había mandado para vender la película, Kimmel decidió mostrárselo a la audiencia en plató y que el público en casa viese la reacción de los allí presentes. Como campaña de marketing, no tiene precio.

Una de las últimas sorpresas públicas del actor ocurrió durante la ceremonia de entrega de los Oscar en 2016, seis años después de haber sido excluido de la ceremonia. Presentaba uno de los galardones junto a Olivia Wilde y, al salir al escenario, sorprendió a todos los presentes al aparecer como Ali G. "Ya sé lo que habéis pensado al verme, 'Ahí viene otro presentador negro'". Durante toda la actuación, era imposible no fijarse en la incomodidad de Wilde a su lado. Luego se supo que Baron Cohen no tenía permiso para salir caracterizado y que su pobre compañera descubrió el cambio de ropa sólo unos segundos antes que el resto de la sala.