Las 20 películas más aburridas de la historia (según los británicos)

"Espantosa", dijo nuestro compañero Sergi Sánchez en su crítica para Fotogramas cuando la vio en el Festival de Berlín. Y casi fue uno de los calificativos más amables que recibió esta adaptación de la novela erótica de E.L. James. "Si quieren excitarse o buscar salidas creativas a la monotonía sexual de su vida en pareja, esta no es su película", seguía Sánchez. La realidad es que esta ha sido una de las películas más lapidadas de los últimos años, aunque eso no ha impedido sus dos secuelas. Pero... ¿aburrida? ¿Acaso no es divertido ver la deriva de sus personajes insulsos y el 'wannabe' de las escenas sexuales? Bueno, hay gustos para todo.

La medalla de plata del aburrimiento cinéfilo es para esta película de terror de bajo presupuesto, que puso de moda el formato del metraje encontrado y atemorizó a un público que no sabía si lo que estaba viendo era real o un 'fake'. Verdad o no, los británicos no están por la labor de aguantar la cámara histérica y los sustos improvisados de Daniel Myrick y Eduardo Sánchez. Y es una pena: es una película revolucionaria e interesante, que marcó un hito en el género de terror.

Ya está, podéis echarle la culpa a Jar Jar Binks: a los británicos no les gustan las precuelas de Star Wars. Este retorno de George Lucas al universo que le dio la fama se lleva la medalla de bronce en lo más aburrido de la historia del cine, y quizás sea un poco injusto. Sin duda, es la de los clones la que debería estar aquí. ¡Dios, qué pesadez!

Pero vamos a ver. VAMOS A VER. Esta película de Ang Lee no sólo fue valiente y rompedora, sino también una sensible historia de amor y los problemas que rodean su pureza. Ocho nominaciones a los Oscar, dos protagonistas -Heath Ledger y Jake Gyllenhaal- inmensos y una grandísima película para el recuerdo. ¿Aburrida? Cuéntaselo a otro.

Pues si esta os pareció aburrida, ¡esperad a ver las otras cuatro! Este filme de Michael Bay inició una saga que ha amasado millones y millones de dólares a base de ver contrucciones metálicas que cobran vida y se patean el trasero unos a otros. Con los efectos especiales como base ineludible y la mentalidad entre excesivamente patriótica y sexista de Bay, puede decirse que esta película protagonizada por Shia LaBeouf y Megan Fox no es lo peor de la franquicia.

Este western futurista dirigido y protagonizado por Kevin Costner fue un fracaso tan grande en taquilla como en crítica. Y encima ni siquiera acertó en su profecía: retrataba un 2013 post-apocalíptico. Pues no, Kevin, sólo tuvimos a Donald J. Trump como presidente de los Estados Unidos, pero por el momento no hay que alarmarse demasiado.

Si es que los británicos son unos provocadores. La flamante ganadora del premio a Mejor Película en los Oscars, con otras cuatro estatuillas, recibe la octava posición en las películas más aburridas de la historia. ¿Es justo? El director Michel Hazanavicius firmó una carta de amor al cine clásico con una película muda en pleno siglo de la sobreinformación. Y parece que no encajó a muchos.

Ay, Baz Luhrmann. Casi que volvamos a los musicales. Esta odisea australiana con Nicole Kidman y Hugh Jackman se va descomponiendo por momentos, con un metraje excesivamente largo (165 minutos) que provoca esa sensación de aburrimiento para los británicos. Y razón no les falta. Hasta Kidman se arrepiente de haberla hecho.

Por norma general, lo original es mejor que la copia. En este caso se confirma con este remake norteamericano de 'Abre los ojos' de Alejandro Amenábar, que repitió con Penélope Cruz pero cambió a Eduardo Noriega por Tom Cruise. Mal. Tuvo un éxito muy relativo (una nominación al Oscar, entre otros reconocimientos), pero le fue imposible borrarse la alargada sombra del filme español, superior en muchos sentidos.

Cerrando el TOP 10 de esta lista encontramos esta película tan espiritual de Jean-Jacques Annaud. Ni Brad Pitt como protagonista pudo salvar a esta película de las críticas de la prensa y la indiferencia del público, aunque cuando hay que hablar de películas budistas o de viajes transformadores, siempre estará ahí para hacer bulto en la lista. Admitámoslo: no la volverías a ver ni en 100 años.

Ay, qué película. Sólo de recordarla nos suben escalofríos por la espalda. ¿Qué no fue mal en esta película de Joel Schumacher? ¡Hasta George Clooney pidió perdón por su existencia! Desde luego, los británicos no perdonan.

Queridos espectadores británicos: ¿cómo se os ocurre poner esta joya de la ciencia ficción en la lista? SHAME. Vale, Stanley Kubrick no es el rey del entretenimiento, y en sus 139 minutos tiene pasajes difíciles de procesar, pero... ¿no queda todo eso olvidado al contemplar la maestría del director en su adaptación de la novela de Arthur C. Clarke? Parece que no.

Con la primera entrega de esta saga distópica, las hermanas Wachowski crearon un filme de culto que ha perdurado hasta nuestros días como una de las películas más interesantes e icónicas del siglo XXI. Ahora bien, quizás eso de convertirlo en trilogía no fue tan buena idea. El crítico de la revista Rolling Stone, Peter Travers, no se andó con chiquitas: "A riesgo de subestimarla, 'Matrix Revolutions' es una mierda".

Pues parece que a pocos les entusiasma esta polémica película de Paul Verhoeven. Y es que no sólo ganó 7 premios Razzie (los anti-Oscars) en su año, sino que también ganó el de "Peor película de la década" y de nuevo fue nominada en el 25 aniversario de estos premios. Y ahora, para rematarla, los británicos dicen que es aburrida. Ay, Verhoeven. Nadie te entiende.

Ron Howard en la dirección, Tom Cruise y Nicole Kidman como protagonistas, música de John Williams... ¿Qué podía ir mal en esta película? Pues una historia plana como una tabla de planchar y unas ínfulas de epicidad que nunca se ven realizadas. Y 140 minutos para "disfrutarla". Yupi.

No es un misterio que las películas de Terrence Malick no son la alegría de la huerta (en lo que se refiere a un entretenimiento dinámico). No, no es una película de Marvel. Pero de ahí a calificarla de aburrida... ¡Ay, británicos! Sí, es espesa y mística, pero también una de las películas más deslumbrantes de este siglo. No merece un puesto en esta lista, aunque gracias a ella durmieras una siesta de campeonato.

El crítico de Fotogramas Jordi Costa la definió como una "síntesis de megablockbuster delirante y turbio dilema moral", que resulta en "un enérgico antídoto contra el orden racional dominante en la industria de la ficción". Lo cierto es que esta película de Darren Aronofsky tiene tantos detractores como defensores, por lo que su presencia en esta lista es comprensible... pero algo injusta.

Ver a Brad Pitt con ese pelazo puede hacernos aguantar un rato, pero los 173 minutos de duración de esta película fueron un suplicio para muchos. No consiguió recaudar ni la mitad de su presupuesto, y en consecuencia se recuerda como un gran fracaso, por muchas veces que la quiera programar Cosmo.

Aunque tuvo un gran éxito en la temporada de premios -¡12 nominaciones a los Oscars!-, esta película de Steven Spielberg no acabó de llegar al corazón de los espectadores británicos. Y quizás el crítico de Fotogramas, Noel Ceballos, tenga el por qué: "Ejercicio de estilo tan sobrio que le cuesta respirar, 'Lincoln' es demasiado autoconsciente de su propia magnitud".

Lo entendemos: por mucho salseo que se llevasen Elizabeth Taylor y Richard Burton (casados y en crisis en la vida real) en la que fue la película más cara del momento, esos 243 minutos acaban pesando. Más de cuatro horas se pasan Cleopatra y Julio César para arriba y para abajo. Una película icónica, sí, pero difícil de aguantar en un mismo visionado.