Las 25 mejores películas de mafiosos y 'gangsters' del cine

Hasta 'El irlandés', podemos decir que esta la cumbre del cine de mafiosos de Martin Scorsese. Al contrario que Coppola en 'El padrino', el director de Queens nos mostró a unos matones más humanos, sucios y descontrolados, interpretados por Robert de Niro, Joe Pesci y Ray Liotta, entre otros. 'Uno de los nuestros' es el poder, pero de la calle, y también una de las mejores películas de Martin Scorsese.

No podía faltar en la lista la considerada como película fundacional del género, dirigida por Josef Von Sternberg. Esta primera gran aproximación al mundo del hampa nos enseña el ascenso de dos íntimos amigos en el mundo del crimen. Todo explotará, claro, cuando uno comience un romance con la novia del otro. Protagonizan George Bancroft, Evelyn Brent y Clive Brook.

Olvidamos demasiado a menudo esta gran película de Brian De Palma, y no deberíamos. Carlitos Brigante (un inmenso Al Pacino) quiere dejar atrás la delincuencia tras pasar cinco años en la cárcel por tráfico de heroína, pero no será fácil escoger siempre el camino correcto. No hay película mejor sobre lo "difícil" que es dejar el mundo del crimen organizado, y es, además, una de las mejores películas de Al Pacino.

Como sociedad multicultural, el crimen organizado americano tampoco tiene como único rostro el italoamericano. Aunque no es algo que reivindicar, claro, los afroamericanos también han tenido sus históricos capos, y así lo demostró Ridley Scott en esta película con Denzel Washington, que interpreta al llamado "Padrino de Harlem". Ni nos pensamos dos veces que esta es, desde luego, una de las mejores películas de Denzel Washington como actor.

Si la 'Ley del Hampa' fue la película fundacional, esta obra de Mervyn LeRoy ha quedado como la que asentó las bases del género. Con permiso de Cagney, Edward G. Robinson siempre será el rostro del gánster de los años treinta tras interpretar el ascenso de Rico, una interpretación ficticia del gran Al Capone que hizo de la película todo un éxito.

Basada en el cómic de Max Allan Collins y Richard Piers Rayner, esta película de Sam Mendes supuso una brillante obra a la altura del género, enfrentando a dos de los actores de rostros más honrados del cine (Tom Hanks y Paul Newman) en una historia sobre la corrupción disfrazada de fidelidad. Es una de las mejores películas de Tom Hanks, y quizás incluso también de Newman.

Paul Newman estaba aquí en el lado contrario, junto a Robert Redford. La película de Roy Hill funciona de un modo tan particular que quizás no te hayas dado cuenta de que iba de mafiosos. De hecho, el objetivo último de los protagonistas es devolvérsela al autor del asesinato del veterano compañero de Redford. 'El golpe' nos dio el pequeño placer de ver cómo, con mucho ingenio, uno puede salirse con la suya, incluso contra una mafia asesina. Solo hay que ser Newman y Redford. Fácil, ¿no? La contamos como una de las mejores películas de Robert Redford.

Junto con 'Scarface', hablamos de la gran obra clásica sobre el ascenso del gánster. Desde sus títulos de crédito hasta la inolvidable irrupción al estrellato de James Cagney, pasando por el pomelo en la cara de Jean Harlow como pionera 'femme fatale', es un referente ineludible. Y su plano final sigue, años después, siendo muy probablemente el mejor desenlace del género. A Tony Soprano le daba pesadillas...

En un género con poca presencia femenina de importancia más allá de la figura de la 'femme fatale', se agradece el peso que tienen en esta película de John Huston los personajes interpretados por Kathleen Turner y Anjelica Huston. Eso sí, es el gran Jack Nicholson el que pivota entre ambas. Por un lado, está el amor y la pasión, por el otro el mantener contento al jefe casándose con la nieta del Don. Sobra decir que el personaje elegirá jugar con fuego.

En una época donde el retrato criminal tenía que ser de negros y blancos, el director de 'Casablanca' entregó una película más reflexiva y profunda sobre las circunstancias que llevan a un joven a convertirse en criminal. James Cagney, Pat O'Brien y Humphrey Bogart protagonizan un relato criminal tan apasionante como terrorífico es su lectura sobre la influencia de estos personajes en generaciones futuras. Cagney, intentando que los jóvenes no sigan sus pasos, encarnó la primera gran muestra de humanidad del gánster cinematográfico. Además, contiene una de las mejores frases de Humphrey Bogart en el cine.

También Jim Jarmusch ha sumado una película imprescindible al género. Lo hizo con un hipnótico y parsimonioso asesino, fan del código samurái, que lleva demasiado tiempo siendo obligado a ejercer como asesino a sueldo. En su retrato de cómo el mal puede ahogar los corazones más puros no deja de recordar al conflicto moral del Marlon Brando de 'La ley del silencio'. Palabras mayores que dan fe de la brillantez de la filmografía de Jim Jarmusch.

Otro recital de tensión e intriga narrativa de Martin Scorsese que le hizo ganar el Oscar a Mejor Dirección y Mejor Película, después de décadas de grandes películas. Quizás no es la que hubiesen escogido sus fans para probar la gloria de los premios, pero habrá que conformarse. Por un lado tenemos a Leonardo DiCaprio y Matt Damon jugando al límite tras las líneas enemigas. Por otro, tenemos a un inmenso y arrollador Jack Nicholson en plan Marlon Brando mal hablado y vulgar. Entre todos, esta es seguro una de las mejores películas de Leonardo DiCaprio.

Quizás sea Brian De Palma el maestro del género, con permiso de Martin Scorsese. Además, sus películas son muy diferentes unas de otras, mostrando esa versatilidad que, aun así, tiene un estilo compartido. Este relato sobre un grupo de policías honrados, liderado por Kevin Costner y Sean Connery, adquiere un toque de relato pulp de justicieros, coronado por un gran Robert De Niro como Al Capone y la famosa escena del carrito del bebé, homenaje a 'Acorazado Potemkin'. Es, claro, una de las mejores películas de Sean Connery (por algo se llevó el Oscar a Mejor Actor de Reparto).

El Scorsese más juvenil, gamberro y visceral que tuvo su cima en 'Taxi Driver' nos dio la que podemos considerar la primera obra mayor del realizador de Queens. Con un sobrio Harvey Keitel y un alocado Robert De Niro que roza la psicopatía, Scorsese nos asomó por primera vez al mundo de la mafia según sus juveniles ojos. Es un relato del crimen y las pandillas a pie de calle, con mucho sudor, sexo y sangre. No hay duda de que es una de las mejores películas de Harvey Keitel, y una de las primeras que le llevó a la fama.

Los fans de Brad Pitt pueden acudir a este clásico moderno del noir en busca de un redondo relato criminal comandado por el gran Andrew Dominik. Además del actor, en este retrato de un asesino a sueldo de la mafia, tenemos la impagable presencia del fallecido James Gandolfini, que demostró que podía seguir brillando entre mafias más allá de 'Los Soprano'. ¿Crees que es una de las mejores películas de Brad Pitt?

David Cronenberg es otro gran nombre que se asomó con acierto al género de las mafias y el crimen organizado, esta vez a través de los rusos en esta película con guion de Steven Knight (que sabe del tema: es el creador de 'Peaky Blinders'). Viggo Mortensen exhibe su asombrosa capacidad para cambiar de registros (y nacionalidad) en este crudo retrato sobre la violencia y el tráfico de seres humanos. Este es uno de los mejores personajes de Viggo Mortensen en el cine.

No podíamos dejar fuera al caracortada más famoso del cine. Tony y su cima del mundo acaban muy mal, pero también son el trato del ascenso al poder criminal más apasionante, violento y descarnado de la historia del cine. La mirada de Howard Hawks a su protagonista, eso sí, es menos condescendiente y más crítica que la de De Palma.

Pocos remakes de una obra maestra han alcanzado el reconocimiento de este. La época es otra y Brian De Palma se permite exhibir el barroquismo comiquero de su Tony Montana (al que interpreta Al Pacino como si le fuese la vida en ello) hasta un nivel tan hipnótico como paródico. Lo cierto es que este mafioso hortera nos cae mejor que el infantil sinvergüenza que encarnó Muni en la versión del 32. La escena final, toda una oda a la violencia, también tiene más garra. La filmografía de Brian de Palma encontró muchos éxitos, y este fue uno de los más sonoros.

Martin Scorsese sale de las calles de Nueva York para irse a las luces y los colores de un casino de Las Vegas. Los ingredientes, sin embargo, son parecidos. El personaje interpretado por Robert De Niro y su mujer (Sharon Stone) se enriquecen a costa de la mafia, hasta toparse con problemas, unos con la forma del pequeño pero matón Joe Pesci. Desde los créditos del gran Saul Bass hasta el trepidante final, una película redonda. Una de las mejores películas de los años 90.

A Humphrey Bogart y Lauren Bacall les hacía falta poca ayuda para hacer una película memorable. Si encima dirigía John Huston y el antagonista es un mafioso interpretado por el mismísimo Edward G. Robinson para qué decir más... Bueno, diremos que los protagonistas acaban como rehenes, teniendo que convivir con los violentos gánsters durante una furiosa tormenta. Bogart y Bacall fueron una de tantas otras parejas reales que han compartido película en la gran pantalla.