'Her', de Spike Jonze




Lo que cuenta: Theodore es un escritor solitario que se compra el último modelo de ordenador que ha salido al mercado, cuyo sistema operativo hasta tiene nombre: Samantha. Ella se convertirá en su nueva amiga, pero su relación cada vez será más estrecha.

Crítica (por Pere Vall): Me estoy convirtiendo en mucho más de lo que me programaron. Estoy emocionada, confesa Samantha, el sistema operativo al que da vida (¡y mucha!) la voz de Scarlett Johansson. Como el Rutger Hauer de 'Blade Runner' (Ridley Scott, 1982), Samantha ha dejado de ser un puro robot, una combinación de chips, programas e información para dar el salto a (casi) la humanidad. Algo en ella se ha transformado, se ha combinado mal/bien para generar un nuevo tipo de personalidad sintética que afectará decisivamente la vida de su comprador, ese Theodore Twombly al que interpreta un Joaquin Phoenix que controla el gesto y la mirada al milímetro. Con sus pantalones hasta el sobaco, habitante de una sociedad de ciencia-ficción, a Theodore también le toca hacer un cambio existencial.

Superdotado observador, Spike Jonze logra con 'Her' su mejor, más hiriente y lúcida obra, un retrato que parece futurista pero no puede ser más contemporáneo, una continuación de su estudio de las relaciones humanas (y el aprendizaje) iniciada con 'Donde viven los monstruos' (2009), pero ya sin el concurso de Maurice Sendak. Temes cada escena de su película (no hay ni una de más) porque ves que Jonze sabe de qué habla, y no puede explicarlo mejor, ni más bellamente.

Soundtrack: Un romance futurista necesita una atmósfera especial y por eso Spike Jonze pidió a sus colegas canadienses de Arcade Fire que pusieran la música de su singular film. No es la primera vez que trabajan juntos, pues ya colaboraron en 'Donde viven los monstruos'. Aún así, otro artista ha puesto también su grano de arena: Karen O, de las Yeah Yeah Yeahs, cuya 'The Moon Song' le valió una nominación al Oscar.





'La LEGO película', de Phil Lord,Chris Miller




Lo que cuenta: Emmet, una figura de LEGO completamente normal, es tomado por el elegido que debe salvar el mundo. Esta confusión lo llevará a enfrentarse con el malvado Presidente Business, aunque contará con la ayuda de importantes aliados, entre los que están Batman, Michelangelo y Wonder Woman.

Crítica (por Noel Ceballos): A principios de la década pasada, la proliferación de brickfilms (o películas de animación amateur confeccionadas a partir de piezas de Lego) tuvo como consecuencia una democratización de las estrategias de la posmodernidad: ahora sólo eran necesarias paciencia y una cámara digital para orquestar remixes, parodias o cruces genéricos de iconografías pop antagónicas. Cuando, en uno de los muchos golpes de genio escondidos en ‘La LEGO película’, el sabio anciano interpretado por Morgan Freeman tiene una discusión con sus equivalentes Gandalf y Dumbledore, uno tiene la sensación de estar ante el brickfilm más ciclópeo jamás construido por dedos humanos, una inteligentísima sátira de ese viaje del héroe campbelliano que el blockbuster contemporáneo ha adoptado como lugar común y una prolongación del inolvidable prólogo de ‘Toy Story 3’ (Lee Unkrich, 2010), que ya anunciaba que las estrategias metalingüísticas del cine futuro se parecen mucho a las de los juegos infantiles.

Lejos de la sofisticación minimalista de un Michel Gondry, ‘La LEGO película’ desarrolla ante nuestros ojos un universo animado complejo y en constante reconfiguración, lleno de ideas visuales extraordinarias y capaz de combinar fluidez CGI con una cuidada simulación de stop-motion. Pero el despliegue visual se quedaría en anuncio caro sin un motor cómico irreverente, empeñado en lograr algo parecido al movimiento (o el gag) perpetuo: si quedaba alguien por enterarse, Phil Lord y Chris Miller se confirman aquí como dos nombres insoslayables de la comedia actual. El dúo resuelve la paradoja de dotar a una multinacional juguetera de un discurso individualista (y, en su tramo final, extrañamente emotivo) a través de un reparto vocal insuperable y un clímax edificado sobre un triple salto mortal que merece entrar, desde ahora mismo, en los anales del cine comercial contemporáneo.

Soundtrack: La banda sonora de este film animado es obra de Mark Mothersbaugh, que también actúa como productor del tema principal de la película, 'Everything Is Awesome'. Son varios los músicos que interpretan la canción a lo largo de la cinta, estando desde el grupo The Lonely Island, Jo Li o Shawn Patterson y Sammy Allen.