Forehead, Poster, Movie, Publication, Fiction, Photo caption, pinterest

Dirección: Christopher Nolan
Reparto: Tom Hardy, Mark Rylance, Kenneth Branagh, Aneurin Barnard, Cillian Murphy, James D'Arcy, Harry Styles, Fionn Whitehead , Jack Lowden
Nacionalidad: USA Año: 2017 Fecha de estreno: 21-07-2017 Duración: 105 Género: Bélica Color o en B/N: Color Fotografía: Hoyte Van Hoytema Música: Hans Zimmer
Sinopsis: Basada en la evacuación de la ciudad francesa de Dunkirk (Dunkerque en español) durante la II Guerra Mundial, concretamente en 1940, cuando un grupo de soldados aliados de Francia, Bélgica y Reino Unido están rodeados por el ejército alemán y deben ser evacuados en todo tipo de embarcaciones hacia Gran Bretaña en medio de una batalla épica.

Crítica

Star FillStar FillStar FillStarStar

Lo mejor: la voluntad de Nolan de explorar nuevos terrenos.
Lo peor: el efecto se impone sobre el poder de la imagen.

Hay una imagen en 'Dunkerque' que rima con otra inmortalizada por la reciente 'Su mejor historia' (Lone Scherfig, 2016): una playa atestada de soldados a la espera de evacuación, que, en el trabajo de Scherfig (aguda reflexión sobre los usos de la propaganda y la necesidad de privilegiar la leyenda sobre el hecho), adoptaba la forma de un vidrio pintado, y que Christopher Nolan esculpe en la apabullante fisicidad de una experiencia cinematográfica inmersiva y sensorial. Que dos películas hayan coincidido en rememorar esa histórica retirada como heroica gesta de supervivencia y triunfo de la acción colectiva de una comunidad (británica) también invita a reflexionar sobre la pervivencia de la propaganda en tiempos de paz: ¿es Dunkerque, por lo que tiene de celebración de los lazos de una domesticidad solidaria consigo misma, el mito a invocar por los británicos a medida de los tiempos del Brexit?

Sofisticado juego temporal

'Dunkerque' supone, al mismo tiempo, una reafirmación de las esencias nolanianas y un radical desvío de lo que, con el tiempo, ha ido erigiéndose en uno de los más fastidiosos factores de sobrepeso de su poética. Por un lado, la película se articula en forma de sofisticado juego estructural con un uso del tiempo que podría entenderse como la respuesta realista a las piruetas oníricas de 'Origen' (2010): tres puntos de vista (por tierra, mar y aire), atrapados en respectivas franjas temporales (una semana, un día, una hora), pero armonizados en un montaje paralelo que, muy ocasionalmente, proporciona gratificantes golpes de efecto narrativos (los relacionados con el personaje de Cillian Murphy) y acaba tendiendo a una contraproducente confusión. Se intuye que el propósito del juego (que culmina en la dilatación de un aterrizaje equiparable a la célebre caída de coche ralentizada en 'Origen') es el de igualar tres experiencias y temporalidades distintas en el idioma común de una misma intensidad regida por el imperativo de supervivencia.

Renuncia a la pompa

Por otro lado, Nolan hace aquí una explícita renuncia a la pompa y al verbo (aunque se le escape alguna sonrojante, por lo enfática, línea de diálogo sobre la supervivencia), para abocarse a un espectáculo puramente visual. Algunos momentos (todo el prólogo dominado por Fionn Whitehead, Aneurin Barnard y una camilla) alcanzan una incuestionable fuerza, pero cabe preguntarse si todas las imágenes de Nolan, sin el espectacular diseño de sonido y sin la banda sonora de Hans Zimmer, poseerían la suficiente elocuencia expresiva como para defenderse por sí solas.