En unos Oscar vigilados estrechamente por la guerra, el traje largo, sobrio, pero cuidadosamente recarnado fue una lección de cómo el glamour sabe acoplarse a todas las vicisitudes. El top ten lo configuraron: Kate Hudson, de las más divinas en ese beige, arena. Sahara pacifico y desierto kuwaití incendiado de terror. Salma Hayek, enarbolando la bandera chic de Suramérica, que como ya dijera Carolina Herrera, el día que Latinoamérica despierte, su chic hará temblar al mundo. Susan Sarandon. que, a ojos de mi amigo La Madrina, unía en su atuendo la fuerza de la actriz helénica con el despliegue de sabiduría de alguna pitonisa del futuro inmediato, Y tuvo Sarandon el mejor discurso para leer entre líneas, contra la guerra y acerca de la labor vital de los artistas por luchar ante todo por el deseo que no se los olvide y exista una razón para cada una de sus acciones. Julianne Moore fue atrevida en el verde, que no le ofreció mucha suerte, pero que le dejaba avanzar sobre el escenario del Kodak como una geisha monotemática y aficionada a confundirse con botellas del ginebra Tankeray. La más de todas, una vez más, Julia Roberts, con el peinado exacto, la base de maquillaje que ya la querría Jordi Labanda para sus personajes de dibujos animados, los dientes más allá y ese andar, de mujer corpulenta con fragilidad de dama ultramillonaria. Ni siquiera Nicole Kidman, ideal en el Saint Laurent más negro que hayamos visto, pudo eclipsarla. Y hay que cerrar el top ten con Diane Lane, porque sigue siendo esa actriz prodigio de cuando era de verdad niña y al mismo tiempo ha sabido esperar este momento "Infiel" para demostrarle a sus colegas que es buenísima.
En el capítulo de lo extraordinario, es decir, todo aquello que no sabemos si nos gusta, nos deleita en su incertidumbre o nos provoca risa, debemos colocar en primer lugar la chaqueta de Julie Andrews, que venía a sumarizar la carrera de la excelsa actriz, mezclando trozos de "Mary Poppins" con "¿Víctor o Victoria?" y un algo, seguramente ese juego de blancos sobre fondo negro, de las monjitas excesivamente colaboradoras de "Sonrisas y Lagrimas". Continúa esta lista de los extraordinarios con la combinación de Caetano Veloso y la cantante mexicana que le acompaño en el tema de "Frida", siendo ella toda una revelación étnica que en un momento dado reunió el espíritu de Katy Jurado, un algo de Lupita Ferrer y de nuestra Sara Montiel, Y extraordinariamente bello, y hábil, Gael García Bernal, que coló mensaje antibélico y mantuvo sonrisa divina delante de una industria muy cuidada a la hora de las reinvidicaciones. Pobre señor Moore, autor de "Bowling for Columbine" que hizo levantar al teatro al recibir un Oscar, y generó así la única manifestación espontánea y de peso contra la guerra de Irak. Pero todo lo conseguido lo perdió al proferir esos insultos a Bush; ese grito, aunque verídico, de vergüenza para Bush, no fue tan bien recibido por ios habitantes del mundo Oscar. Y es que en los Oscar todo se acepta menos lo que parece fuera de lugar.
Estos Oscar tuvieron momentos inspirados contra la guerra, el más acertado, por melodramático, joven y conmovedor, el de Adrien Brody, el actor galardonado por "El pianista", que recordó sus emociones terribles a raíz del film que interpretó y hasta a un amigo suyo de Queens, que todos deseamos que regrese sano y salvo a casa. O, que en algún punto del horror de Irak alguien le acercara una radio para escucharle.
Jennifer Lopez, que fue un desastre el ano pasado, es la prueba viviente de que en Hollywood hay segundas oportunidades y apareció en el verde lima que un buen chiffon transforma en divino y combinándolo con la sombra de sus ojos, algo que no veía desde mi infancia en Caracas cuando las chicas del servicio salian a encontrarse con sus novios en ios días libres. Y hay que observar bien el instinto comercial de la Zeta-Jones, preparando ya la aparición de una línea sexy-villana para la madre posconquista de Irak.
El glamour sabe adaptarse a todas las vicisitudes
por Boris Izaguirre
Por Redacción Fotogramas

Ganadores de los Oscar 2003

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