Después de comenzar la segunda temporada con dos geniales episodios, el ritmo de 'Big Little Lies' se ralentiza un poco con "The End of the World". Por mucho que nos guste pasar una hora con estos personajes, este capítulo es la primera vez en esta nueva entrega en que nos hemos preguntado si a la serie podría faltarle esta vez ese elemento de misterio que fue tan importante en la primera entrega.
2x03: 'THE END OF THE WORLD'
En este nuevo episodio vemos como Madeline y Ed visitan al Dr. Reisman en busca de terapia tras enterarse este del affair de su mujer con el profesor de teatro. Madeline admite que se equivocó y está desesperada por arreglar su matrimonio, hablando más tarde con Celeste sobre como, cuando era niña, su padre engañó a su madre, siendo su primera ruptura con Nathan una confirmación de su peor temor, los matrimonios no funcionan. En esta improvisada sesión de terapia entre las dos mujeres, Celeste también analiza su vida "plana y aburrida".
Pero peor que ellas está Bonnie, que sigue en shock tras acabar con Perry y empieza a tener recuerdos sobre como su madre le enseñó (de una manera un tanto brusca) a aprender a nadar. Esta acepta ir a comer con Ed, que parece conseguir lo imposible, que Bonnie se ría y parezca feliz. Madeline se sorprende cuando los ve juntos con tanta conexión y Ed se lo deja claro, piensa seguir castigándola hasta que lo desee.
Pero este no será el único drama en Monterrey. Tras enterarse de que Perry violó a Jane, dando fruto a Ziggy, Mary Louise no cree que su hijo pudiese hacer algo así, tendiendo una emboscada a la joven en su trabajo para pedirle que se haga una prueba de paternidad. Jane se resiste, pero cuando Mary Louise la acecha de nuevo y ve a Ziggy de lejos, las mujeres acaban tomando un café. Entonces, la sufrida Mary Louise ve al instante que Ziggy era de Perry porque el niño es una versión idéntica de su otro hijo, Raymond, quien murió de niño. "Sólo quiero creer que había algo bueno en él", dice una fantástica Meryl Streep.
Y hablando de niños, parece que en casa de Renata se respira bastante tensión, porque su hija Amabella es ingresada por un ataque de ansiedad (sin nadie que le haya mordido esta vez). ¿Pero que ha estresado tanto a la pequeña? Resulta que a Amabella le preocupa el cambio climático. Obviamente también está un poco preocupada por sus padres, pero su drama es sobre todo debido al fin del mundo.
Por supuesto, Mary Louise sigue con su principal objetivo claro y vuelve a visitar a la detective Quinlan para obtener información actualizada sobre el caso de Perry. Y parece que no es la única que lo echa de menos, porque Celeste vive su propio drama pensando en él, teniendo incluso nuevas marcas en el cuerpo que su psicóloga puede ver. "Echas de menos las peleas", le dice la mujer, cosa que Celeste niega, justificando sus nuevas marcas de venir por haber separado una pelea entre los chicos.
Mientras que el resto de las Cinco de Monterrey están en un lugar bastante oscuro, Jane parece encontrar un poco de felicidad en compañía de Corey, que podría ser el hombre perfecto para ella. Y el episodio acaba mostrándonos diferentes tomas de las mujeres protagonistas, inmersas cada una en su drama particular.
