"La venganza es un plato que se sirve en plató". Esta frase, mucho más aguda en su versión en castellano (dish/set no hacen el mismo juego que plato/plató), que lanza el personaje David Tennant en el segundo episodio, ejemplifica muy bien de qué va 'Rivales' y su esencia. Esta ficción británica que llegó hace unos días a Disney+ nos trae una historia entre bambalinas televisivas llena de fiestas de lujo, puñaladas por la espalda y mucho, mucho sexo. ¿Alguien da más?

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Basada en la novela homónima de Jilly Cooper, que no describe una historia real aunque lo parezca, 'Rivales' nos transporta al excesivo mundo de la televisión británica de los años 80, pero desde su primera escena deja clara cuál es su propuesta: asistimos a un desenfrenado polvo en el baño de un Concorde. Queda claro que no escatimará en provocar y entretener con un tono que se mueve entre la sátira y lo camp sin caer en lo ridículo.

Para entrar en ese mundo de lujo y exceso, la serie se sirve de Declan O'Hara y su familia. Encarnado por Aidan Turner ('Poldark'), es un periodista riguroso de la BBC que se deja seducir por la televisión privada por la promesa de mayor libertad y también un generosísimo cheque. Él y los suyos son, a priori, los más cuerdos de todos, pero desde el inicio se intuye que se irán corrompiendo en este entorno, cuya puerta de entrada les abre Tony Baddingham (David Tennant), director de un canal de televisión privado llamado Conirium.

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Pero la rivalidad de la que nos advierte el título de la serie no es entre ellos dos, sino entre Tony y Rupert Campbell-Black (Alex Hassell), un exdeportista metido a político tan sexy como sinvergüenza. Ambos encarnan los excesos y las tensiones de una élite acomodada y su historia gira en torno a sus egos desmedidos y su lucha por el dominio en el mundo del entretenimiento. Son, a grandes rasgos, dos señores con mucho dinero y una historia de rivalidad que se remonta décadas, dispuestos a ponerse la zancadilla siempre que puedan. O, dicho de forma más soez, una competición constante por medirse las po****.

'Rivales', con todos esos ingredientes dispuestos sobre la mesa (lujo, sexo, cuernos, poder, televisión, hipocresía, mansiones, fiestas...), no esconde su naturaleza de culebrón de alta cuna y bajas pasiones -de hecho, en Conirium tienen su propio culebrón sobre granjeros sexys-, pero utiliza los códigos de 'Falcon Crest' y similares añadiendo humor, mala leche y mucha autoconsciencia. Es una serie gozosa, pero no vacía, donde la frivolidad es un vehículo y no un fin.

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Con un elenco exquisito (la mera presencia de Tennant siempre merece que demos una oportunidad a sus series, pero el resto aquí está a altura), un guion ágil y una producción que no escatima, 'Rivales' destaca como una de las series más jugosas y adictivas de los últimos meses de 2024. Y va directa también a competir en los rankings de las mejores series del año. Puro entretenimiento.

Puntuación: 8/10

La serie de quienes esperaban un cruce entre 'Downton Abbey' y 'Dinastía'

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Ficha técnica

Guion: Dominic Treadwell-Collins, Laura Wade Dirección: Alexandra Brodski, Elliot Hegarty, Dee Koppang O'Leary Reparto: David Tennant, Aidan Turner, Alex Hassel, Danny Dyer, Katherine Parkinson, Nafessa Williams Año: 2024 Fecha de estreno: 18-10-2024 Género: Drama Duración: 8 episodios Plataforma: Disney+

Sinopsis: Ambientada en el condado ficticio inglés de Rutshire, Rupert Campbell-Black (Alex Hassell) y Lord Tony Baddingham (David Tennant) tienen una rivalidad que se filtra en el mundo de la estación de televisión Corinium.

Headshot of Álvaro Onieva

Nací en Wisteria Lane, fui compañero de piso de Hannah Horvath y 'Chicago' me volvió loco porque Roxie Hart soy yo. Tengo la lengua afilada, pero, como dijo Lola Flores, "me tenían que dar una subvención por la alegría".